Calma con TTouch.

“Mientras subía las escaleras del portal, comenzó a sentir la calidez de su hogar. Olía a las lentejas que preparaba su abuela. Escucho los ladridos de su perro y como corría hacia la puerta. Era increíble, aún le quedaba un piso por subir y ya Lobito la esperaba.

La recibió con tanta alegría, como si hubiera perdido la cabeza, estaba completamente loco. Pero te diré un secreto, los mejores seres los están. Se quedó rendida a sus lametones.

Sara cogió una alfombra y se sentó en el suelo. Llamo a Lobito que sin dudar acudió con ella. Respondía con los gestos con especial viveza conforme a un código no escrito en ninguna parte, pero que los dos comprendían.

Coloco su mano izquierda en la parte inferior del cuello de Lobito de forma suave y sin apretar. Puso su mano derecha sobre el cuerpo del perro. Empezó a las 6 y empujo la piel del perro con sus dedos planos, en sentido de las agujas del reloj, un círculo y un cuarto. El bajo sus patas delanteras para tumbarse en su regazo como un leopardo echado.

El dedo gordo de Sara descansaba sobre el manto del perro y mantenía la conexión con los otros dedos. Dibujaba los círculos con especial lentitud y una presión suave. En cada uno tardaba dos segundos. Cuando terminaba un círculo lo conectaba con el siguiente deslizando la mano sobre el manto del perro a la siguiente posición a unos centímetros de distancia.

Lobito sintió que tenía esa necesidad por restablecer contacto con sus propias emociones, la búsqueda de esa verdad emocional que expresaba con su comportamiento. Sumergidos en la tranquilidad, él estaba en ella y viceversa. Y todo lo que es, fue y será. El reloj aún no había dado el último Tic de ese TTouch.

Su abuelo siempre decía, que lo único que haces que realmente cuente, es lo que haces por los otros.

Y yo misma escribí este microcuento con c(alma).”

Hemos descrito como puedes practicar con tu perro el “TTouch leopardo echado” Es un masaje suave, relajante que crea un lazo de confianza entre tu perro y tú.

Texto inspirado en “Alicia en el País de las Maravillas” de Lewis Carroll y en “El método de Tellington-TTouch” de Linda Tellington-Jones.

Si quieres recibir información quincenal sobre como trabajar la calma, el olfato y muchas cosas más con tu perro escríbenos guau@corazoncanino.com

Terapias Naturales. El método Tellington-TTouch.

La naturaleza nos envuelve en una magia especial que no siempre percibimos con los cinco sentidos. Los poderosos efectos de las terapias naturales pueden ser notables tanto a nivel físico, mental y emocional. Los animales por estar mejor sintonizados con la naturaleza son muchos más receptivos a este tipo de técnicas, ya que además no ponen  barreras mentales que puedan inferir en los resultados. Es muy importante remarcar que tampoco tiene efectos secundarios dañinos y que se pueden combinar con otros tratamientos.

En 1983, nació el TTouch. Este método ofrece un enfoque positivo en el bienestar del perro. Aunque, es mucho más que una técnica de adiestramiento. Con la combinación Telling TTouch y otros ejercicios como olfato y propiocepción puedes mejorar el rendimiento, la salud de tu perro y resolver problemas comunes de comportamiento.

Este método puede ayudar a perros con problemas de nerviosismo, mordisqueo excesivo, ladrido, que tiran de la correa, que muerden por inseguridad o timidez, con miedos a las tormentas, artritis, displasia de cadera …

Es un lenguaje no verbal, que estimula el funcionamiento de las células del cuerpo del animal y activa las vías neuronales al cerebro. Además, se liberan hormonas que reducen los niveles de estrés. Al conectar con tu perro aumentarás vuestra confianza mejorando la sensación general de bienestar.

Con que practiques dos o diez minutos al día TTouch obtendrás resultados. Al comenzar asegúrate que tus dedos están relajados y que mueves su piel ejerciendo una presión suave en un círculo y un cuarto. Cuando terminas con un círculo, desplazas tu mano a otro punto y comienzas otro TTouch. De este modo trazarás líneas que conectan los círculos a lo largo del cuerpo del animal.

Recuerda:

  • Con tu propio perro se supone que le conoces lo suficiente como para anticiparte ante cualquier reacción repentina o inesperada. Cuando te aproximes deberás hacerlo con calma y por el costado.

  • Si te percatas que el perro se muestre incómodo, reduce la presión o cambia a otra parte del cuerpo.

  • Respeta la postura en a la cual animal esté cómodo (de pie, sentado o tumbado).

  • Ponte en una posición natural. Tu muñeca debe estar recta y relajada.

  • Realiza una respiración regular y calmada.

  • Apoya la cabeza del perro sobre una mano si estás trabajando su cabeza.

  • Para perros con problemas de cadera o columna, se recomienda que el animal este en pie y pondrás una mano debajo su abdomen.

Abre el corazón para establecer una relación feliz con tu perro. Y es que las palabras pueden muy bien ser lo que el hombre emplea cuando falla todo lo demás.


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Piensa con la nariz.